Ejemplos de Tortugas marinas
Tortuga Laud Dermochelys coriacea
Tortuga marina, gigantesca tortuga que llega a medir 2,4 m de l longitud y 500 Kg. de peso.
Esta tortuga carece de ese caparazón óseo (formado por los ocho pares de costillas soldadas entre sí) que normalmente tienen el resto de tortugas marinas y en su lugar tiene incontables plaquitas óseas (desde medio a un par de centímetros) unidas entre sí, que no soldadas, dentro de un tejido cartilaginoso); de ahí su otro nombre: Tortuga de cuero.
La tortuga es de color castaño moteado en amarillo, sus extremidades son fuertes y en forma de remo para nadar grandes distancias; las patas delanteras son de un tamaño considerable, especialmente en los especímenes jóvenes. La cabeza y las extremidades están desnudas, carecen de placas óseas. El macho pasa toda su vida de adulto en el mar, mientras que la hembra sale del agua para desovar en las playas. Las tortugas laúd se alimentan de medusas, algas y moluscos. Está considerada una especie vulnerable.
La familia Dermochelydae posee un único representante a nivel mundial, el cual se encuentra en aguas venezolanas. Los individuos adultos se alimentan básicamente de calamares y medusas
Esta tortuga carece de ese caparazón óseo (formado por los ocho pares de costillas soldadas entre sí) que normalmente tienen el resto de tortugas marinas y en su lugar tiene incontables plaquitas óseas (desde medio a un par de centímetros) unidas entre sí, que no soldadas, dentro de un tejido cartilaginoso); de ahí su otro nombre: Tortuga de cuero.
La tortuga es de color castaño moteado en amarillo, sus extremidades son fuertes y en forma de remo para nadar grandes distancias; las patas delanteras son de un tamaño considerable, especialmente en los especímenes jóvenes. La cabeza y las extremidades están desnudas, carecen de placas óseas. El macho pasa toda su vida de adulto en el mar, mientras que la hembra sale del agua para desovar en las playas. Las tortugas laúd se alimentan de medusas, algas y moluscos. Está considerada una especie vulnerable.
La familia Dermochelydae posee un único representante a nivel mundial, el cual se encuentra en aguas venezolanas. Los individuos adultos se alimentan básicamente de calamares y medusas
Tortuga Verde
Pertenece a la familia Quelónidos, Tortuga marina de gran tamaño, así llamada debido al color de su grasa, aunque el animal es de color castaño. Es la tortuga de natación más rápida y es capaz de alcanzar hasta 32 km/h de velocidad. Es muy frecuente en todos los mares cálidos del mundo y, en ocasiones, durante el verano, llega hasta las costas del Atlántico norte de Estados Unidos y Europa. Es considerada una especie accidental en las costas de la península Ibérica, Baleares y Canarias. En los adultos, el caparazón puede alcanzar más de 1 m de longitud y el peso corporal puede superar los 180 kg. Al igual que otras tortugas marinas, la tortuga verde tiene las extremidades delanteras en forma de remo.
Se diferencia de otras tortugas marinas en que tiene un único par de placas en la parte superior de la cabeza (entre los ojos, un caparazón relativamente liso carente de resaltes) y sólo cuatro placas no solapadas a cada lado del caparazón. El macho no abandona nunca el mar; la hembra sólo lo hace por la noche para poner sus huevos, hasta 200 en número, más arriba de la marca de la marea alta. Las crías salen del huevo incubado por el calor del sol y no tardan en dirigirse hacia el mar. Las tortugas verdes son omnívoras, pero se alimentan fundamentalmente de vegetación marina. Debido a la sobreexplotación, el número de tortugas verdes está disminuyendo rápidamente, por lo que está considerada una especie amenazada.
Se diferencia de otras tortugas marinas en que tiene un único par de placas en la parte superior de la cabeza (entre los ojos, un caparazón relativamente liso carente de resaltes) y sólo cuatro placas no solapadas a cada lado del caparazón. El macho no abandona nunca el mar; la hembra sólo lo hace por la noche para poner sus huevos, hasta 200 en número, más arriba de la marca de la marea alta. Las crías salen del huevo incubado por el calor del sol y no tardan en dirigirse hacia el mar. Las tortugas verdes son omnívoras, pero se alimentan fundamentalmente de vegetación marina. Debido a la sobreexplotación, el número de tortugas verdes está disminuyendo rápidamente, por lo que está considerada una especie amenazada.
Información de las Tortugas marinas
Las tortugas marinas son grandes reptiles que habitan los océanos desde hace unos 200 millones de años. Se encuentran bien adaptadas al medio marino gracias a un caparazón de forma hidrodinámica y los miembros modificados en forma de aletas, lo cual les permite un fácil desplazamiento en el mar. Poseen pulmones, por ende deben salir a la superficie a respirar.
Estos reptiles marinos alcanzan la madurez sexual reproductiva después de unos 20 ó 30 años. Realizan migraciones entre sus áreas de alimentación y refugio y los lugares de reproducción. Estas migraciones se efectúan cada 2 ó 3 años. Los machos y hembras se aparean en las cercanías de las playas de desove. Luego, las hembras salen durante la noche a la playa con el propósito de depositar sus huevos. Las evidencias experimentales, basadas en estudios de genética molecular, apoyan la hipótesis de que las hembras retornan a anidar a la playa donde nacieron. Una hembra desova varias veces en la época de puesta, con un intervalo de unos 15 días entre cada ovoposición. Un nido contiene un promedio de 100 huevos.
El período de incubación es de aproximadamente 2 meses, tras los cuales los tortuguillos emergen del nido y se dirigen hacia el agua, orientándose por el reflejo luminoso sobre la superficie marina. Resulta interesante señalar que las tortugas marinas no poseen cromosomas sexuales diferenciados, por ende, la determinación del sexo se ve influenciada por distintos factores ambientales. El más importante es la temperatura de incubación. Así, temperaturas en la arena de 28 ó 30 grados centígrados conducen a obtener una proporción equivalente de sexos en los tortuguillos. En cambio, temperaturas inferiores a ese intervalo, producen una cantidad mayor de machos y temperaturas superiores generan mayoritariamente hembras.
Se presume que por efecto de las corrientes, los tortuguillos son conducidos hacia zonas de grandes concentraciones de algas flotantes, fuentes éstas de alimento y refugio. Sólo uno de cada mil tortuguillos logra alcanzar la edad adulta.
Video documental de las tortugas marinas
Ejemplos de Conservación de las Tortugas marinas
En el área del Caribe, Venezuela ha sido un país pionero en la conservación de las tortugas marinas. Por ejemplo, en 1972, Isla de Aves y una porción del área marítima circundante fue decretada como refugio de fauna silvestre, con el objetivo de proteger de forma integral este importante sitio de desove de tortuga verde en el Caribe oriental. En ese mismo año, se decreta el Refugio de Fauna Silvestre Cuare, el cual contiene áreas de alimentación de Chelonia mydas en la parte oriental del Estado Falcón.
Una valiosa herramienta para la penalización de delitos que involucran a las tortugas marinas, ha sido la promulgación de la Ley Penal del Ambiente en 1992. A su vez, como ya se mencionó, en 1996 se promulgan los decretos Nº 1485, el cual ratifica la resolución Nº 95 (1979) que veda una serie de especies de fauna silvestre, incluyendo a las 5 especies de tortugas marinas presentes en el país y Nº 1486, el cual oficializa el listado de especies en peligro de extinción.
Por otra parte, desde 1979 en el Refugio de Fauna Silvestre Isla de Aves, investigadores de la Fundación para la Defensa de la Naturaleza que se alojan en la base científico militar Simón Bolívar, realizan un programa de marcaje y seguimiento de la tortuga verde.
Desde finales de los años setenta, la Fundación Científica Los Roques adelanta un programa de cría en cautiverio (headstarting) de Caretta caretta, Eretmochelys imbricata y Chelonia mydas dentro del Parque Nacional Archipiélago Los Roques, mediante el cual se han liberado unas 10000 tortugas. Sin embargo, los beneficios ecológicos de estos programas son altamente cuestionados, por lo que los más importantes se han descartado a nivel mundial como una estrategia efectiva de conservación.
En nuestro país existe un total de once Parques Nacionales costeros, marinos y marino-costeros. Estas áreas además de albergar espectaculares paisajes de características únicas en el territorio, también incluyen una significativa porción de las zonas más relevantes de alimentación, refugio y reproducción para las tortugas marinas de Venezuela, como las existentes en los parques nacionales Morrocoy, Mochima, Península de Paria y Archipiélago Los Roques, entre otros. El Instituto Nacional de Parques tiene bajo su responsabilidad las principales playas de anidación y zonas de alimentación de tortugas marinas y dentro de los respectivos planes de ordenamiento y reglamentos de uso de estas áreas protegidas, se contemplan regulaciones específicas para la vigilancia y conservación de estas especies.
Otras iniciativas procedentes de instituciones de tipo gubernamental o privado, han producido material divulgativo, tales como afiches, calcomanías, trípticos, boletines y franelas.
Las actividades de sensibilización en esta materia, han incluido varias localidades costeras e igualmente se ha abordado la capacitación de estudiantes y de las personas vinculadas a la protección de estos quelonios, en los sectores gubernamental y privado.
A fin de identificar y establecer prioridades de conservación de las tortugas marinas en el país, el Grupo de Trabajo en Tortugas Marinas de Venezuela (GTTM), el cual opera desde 1987, se encuentra concluyendo el Plan para la Conservación y Recuperación de las Tortugas Marinas de Venezuela, apoyado por la Red para la Conservación de las Tortugas Marinas del Gran Caribe (WIDECAST).
Una reciente publicación que intenta desde hace un año brindar información sobre acontecimientos relevantes, eventos, cursos, oportunidades de trabajo voluntario y publicaciones recientes relacionadas con el mundo de las tortugas marinas, es un boletín denominado TORTUGA NEWS, distribuido actualmente a nivel nacional e internacional.
Estos reptiles marinos alcanzan la madurez sexual reproductiva después de unos 20 ó 30 años. Realizan migraciones entre sus áreas de alimentación y refugio y los lugares de reproducción. Estas migraciones se efectúan cada 2 ó 3 años. Los machos y hembras se aparean en las cercanías de las playas de desove. Luego, las hembras salen durante la noche a la playa con el propósito de depositar sus huevos. Las evidencias experimentales, basadas en estudios de genética molecular, apoyan la hipótesis de que las hembras retornan a anidar a la playa donde nacieron. Una hembra desova varias veces en la época de puesta, con un intervalo de unos 15 días entre cada ovoposición. Un nido contiene un promedio de 100 huevos.
El período de incubación es de aproximadamente 2 meses, tras los cuales los tortuguillos emergen del nido y se dirigen hacia el agua, orientándose por el reflejo luminoso sobre la superficie marina. Resulta interesante señalar que las tortugas marinas no poseen cromosomas sexuales diferenciados, por ende, la determinación del sexo se ve influenciada por distintos factores ambientales. El más importante es la temperatura de incubación. Así, temperaturas en la arena de 28 ó 30 grados centígrados conducen a obtener una proporción equivalente de sexos en los tortuguillos. En cambio, temperaturas inferiores a ese intervalo, producen una cantidad mayor de machos y temperaturas superiores generan mayoritariamente hembras.
Se presume que por efecto de las corrientes, los tortuguillos son conducidos hacia zonas de grandes concentraciones de algas flotantes, fuentes éstas de alimento y refugio. Sólo uno de cada mil tortuguillos logra alcanzar la edad adulta.
Video documental de las tortugas marinas
Ejemplos de Conservación de las Tortugas marinas
En el área del Caribe, Venezuela ha sido un país pionero en la conservación de las tortugas marinas. Por ejemplo, en 1972, Isla de Aves y una porción del área marítima circundante fue decretada como refugio de fauna silvestre, con el objetivo de proteger de forma integral este importante sitio de desove de tortuga verde en el Caribe oriental. En ese mismo año, se decreta el Refugio de Fauna Silvestre Cuare, el cual contiene áreas de alimentación de Chelonia mydas en la parte oriental del Estado Falcón. Una valiosa herramienta para la penalización de delitos que involucran a las tortugas marinas, ha sido la promulgación de la Ley Penal del Ambiente en 1992. A su vez, como ya se mencionó, en 1996 se promulgan los decretos Nº 1485, el cual ratifica la resolución Nº 95 (1979) que veda una serie de especies de fauna silvestre, incluyendo a las 5 especies de tortugas marinas presentes en el país y Nº 1486, el cual oficializa el listado de especies en peligro de extinción.Por otra parte, desde 1979 en el Refugio de Fauna Silvestre Isla de Aves, investigadores de la Fundación para la Defensa de la Naturaleza que se alojan en la base científico militar Simón Bolívar, realizan un programa de marcaje y seguimiento de la tortuga verde.
fuente personales.com/espana/valencia/tortugas/
No hay comentarios:
Publicar un comentario